En el año 1.490, Don Luís de Acuña Herrera, caballero que
acompañaba a Fernando el Católico, decidió levantar la Iglesia de la Merced
donde antes se ubicaba una ermita mozárabe edificada en el arrabal de la Churra
en Baza. Se iniciaban las obras, cuando uno de los obreros, Juan Pedernal, de
origen accitano, picando en la demolición de un yesón, oyó sorprendido que de
aquella oquedad salía un dulce y lastimoso grito que parecía venir de las
entrañas de la tierra, y que decía "¡TEN PIEDAD!". Había encontrado
la talla de una Virgen, la cual recibiría desde entonces el nombre de Nuestra Señora
de la Piedad, en alusión a la expresión.
El obrero de Guadix dio motivos de graves trastornos entre
los obreros por disputarse la posesión del icono, llegando a implicar a las
autoridades de las dos ciudades de modo que tuvo que tomar parte la justicia de
aquellos tiempos, resolviendo dejar la propiedad y posesión de la imagen para
Baza, y el derecho de celebrar anualmente las fiestas religiosas el día 8 de
Septiembre, festividad de la Virgen de la Piedad, al Cabildo de Guadix.
Se acordó que si un comisionado de la ciudad de Guadix
lograba entrar en Baza y llegar a la iglesia de la Merced sin ser manchado,
podría recuperar a la Virgen para Guadix.
Interés turístico
Las fiestas de Moros y Cristianos de Benamaurel, Cúllar y
Zújar tienen la declaración de interés turístico andaluz, fruto del trabajo que
se viene realizando en los últimos años. Ahora se quiere dar un gran paso más y
es conseguir convertirse en Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Todas las
fiestas de Moros y Cristianos del país se han unido y ya han presentado la
candidatura, primero fue en tierra levantinas y hace unas semanas se presento
en Andalucita en una acto celebrado por Benamaurel que tuvo como escenario el Teatro Ideal de Baza.
Una vez un escritor granadino, dijo que ojala todas las
guerras fueran como las que estos días van a librar los bandos cristianos y
moros en Benamaurel, Cúllar y Zújar donde al final unos y otros terminan
bebiendo y comiendo juntos en las barracas, cuarteles o en la plaza del pueblo.